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Maternidad en la calle Goya

Foto: Maternidad de la Calle Goya en la actualidad
 

Hace 45 años que Felipe y Paula, un joven matrimonio de Guadalupe quiso probar fortuna en el extranjero y concretamente en el país galo. Con dos hijas pequeñas bajo el brazo, y otra criatura en el vientre de ella -imagino que con lo puesto y algo más en alguna maleta de madera- emprendieron uno de los momentos más complicados de su vida, hasta entonces estrechamente ligada al pueblo en el que vivían.

Quiso el destino que aquella expectativa se truncara en la frontera española, cuando un reconocimiento médico de Felipe le dejó inhabilitado para pasar al otro lado y poder desempeñar ese trabajo que le esperaba en un pueblo francés, junto a la casa que con celo tenían adecentada la familia de emigrantes que ya estaban instalados allá.

De regreso a Extremadura, con más pena que gloria, hicieron escalada en Madrid donde según cuenta ella, no lo pasaron demasiado bien, a pesar de que allí vivían familiares directos, que consintieron que esa mujer  encinta durmiese en el suelo, con lo que supone eso en la época del otoño, y con la consecuencia que tuvo después para la criatura que alumbró, que resultó ser niño y que curiosamente nació con una bronquitis de caballo.

Quiso el destino también que ese hijo viniera al mundo en la capital de España, en ese Madrid de finales de los sesenta y en un lugar especial, que aún hoy, 45 años después, no conoce por circunstancias de la vida, aunque al parecer es una asignatura pendiente en su agenda. Aquel lugar se llamaba Casa de la Madre y estaba en el número 120 de la madrileña Calle Goya. En él se atendía a gente sin recursos y allí dio a luz Paula .

Ese niño nacido el 2 de noviembre de 1969 en la Casa de la Madre soy yo. Esa familia es la mía. Hoy cumplo 45 años. Me siento  muy afortunado y especialmente privilegiado porque tuve suerte al haber permanecido junto a mi  familia, cosa que no les pasó a otros pequeños en aquel lugar y prácticamente en la misma época, como conocemos hoy a través de los medios de comunicación y el caso de los niños robados.

Quería compartir esta parte de mi historia personal de la que jamás he hablabado en este día tan especial para mi, y porque creo que estas historias necesitan ser contadas.

Gracias por estar al otro lado y seguir mis opiniones en este espacio.